CAMBIAR EL PATRON DE CONDUCTA

Es angustiante percatarse de la situación económica, política, social y tecnológica que prevalece en Guatemala. Lejos de avanzar y progresar, de encontrar la luz al final del túnel, incluso nos falta capacidad para preservar los pequeños pasos hacia delante que esporádica y marginalmente hemos ido dando. tecnologicamente hemos avansado medio paso, porque no se de la oportunidad a toda la jueventud, cuando digo toda, no es solo, aquel 3% del sector que tiene acceso al internet y puede comprase una computadora.

En el transcurso de la última década bajo la conducción de politiqueros y demagogos, hemos mostrado un acentuado talento para retroceder, para destruirnos y fragmentarnos los unos a los otros y para pensar exclusivamente en el día a día. Siempre nos hemos caracterizado por ver el árbol sin percibir la dimensión del bosque. y eso en todos los aspectos de la vida, deportivo, laboral, social, capasidad individual.

La imagen que proyectamos es una sociedad de cangrejos, ágil y rápida para retroceder a mucha velocidad. ya que nunca planeamos ni mucho menos vemos el futuro, siempre actuamos para el dia de hayer, dentro de 20 anos que importa.

Mientras que el mundo evoluciona con una rapidez vertiginosa, a un ritmo impresionante, los guatemaltecos pareciéramos haber encontrado la fórmula para detenernos en el tiempo.solo en un sector es como que caminara, pero el resto de la nacion se detuvo en esa capsula del tiempo, pasan los anos y todo sigue igual.

 En el extranjero, comentan con ironía, y no sin razón, que periódicamente llegan a la conclusión de que tocamos fondo. No obstante siempre encontramos la forma de sumergirnos a mayores profundidades y oscuridades. veamos que la violencia, sigue dando pasos agigantados, sin que nosotros veamos una solucion, el narcotrafico ya es una sociedad y la  vemos como algo normal. ya lo ven como una forma de vida, sin nesesidad de estudio la juventud puede obtener grandes fortunas.
 La triste historia es que este comentario irónico tiene mucho de verdad. Como también parece ser cierto que tenemos la cualidad de soportar como mártires o simples conformistas, cualquier situación, por grave y difícil que sea. violencia, impunidad, mentira, desigualdad, pobresa, hambruna, analfabetismo, razismo, etc etc.

 Es increíble, pero es como que aquí nunca pasara nada, que en lugar de sangre, tuviéramos horchata o incaparina en las venas. Nos hemos acostumbrado sin dificultades a aceptar con la cabeza baja las grandes carencias de infraestructura de salud, de seguridad, de educación y de soporte al aparato productivo, así como la corrupción y el irrespeto a la ley.
 Sin decir ni pío, hemos aceptado por muchos años que el presupuesto del Estado responda a las prioridades de los diferentes gobiernos de turno y de aquellos que tienen el privilegio de trabajar en las altas esferas del poder público. Prioridades que, sobra decir, están muy alejadas de las necesidades más urgentes e importantes de nuestra sociedad civil.
 Es hora ya de que cambiemos nuestra forma de actuar, que rompamos con el "costumbro", y que contribuyamos jugando un papel más activo, a que esta nave que va en picada  llamada Guatemala, encuentre un camino más afortunado.
 Basta de los 28 partidos politicos que nos tratan de gobernar, de esa gana de solo ver nuestro vienestar personal y familiar, demonos la mano de una ves, no tengamos asco del  guatemlateco que vive a pie, porque unidos de verdad seremos otros, y no solo el 3 %